Aspectos del plan de acción tutorial

El derecho y la responsabilidad de la educación de los hijos corresponde a sus padres, a quienes el colegio ayuda en su tarea de primeros educadores.

El cometido principal del tutor es el de ayudar a los padres y al propio alumno a diseñar el proyecto educativo personal, procurando que haya unidad de criterios y de acción educativa entre la familia y colegio.

Ya desde la etapa de Educación Infantil, el tutor no debe desperdiciar ninguna ocasión para hablar con sus alumnos. Desde los seis años estas conversaciones serán más profundas conforme van siendo más maduros; conviene aprovechar todas las oportunidades que ofrece la convivencia diaria para atender a cada uno y para formarle precisamente a través de esas incidencias ordinarias.

Es necesario que los padres tengan en cuenta que el rendimiento académico es uno de los temas, no el único, que deben tratar con el tutor/a.

Misión del tutor/a

  • Es colaborador de los padres, a quienes corresponde el derecho irrenunciable de la educación de su hijo.
  • Es el nexo entre la familia y el colegio, que procura la unidad de criterios y de acción educativa.

  • Promueve la “formación” (dar indicaciones) de los padres, base indispensable para conseguir la de sus hijos.

Ante todo, el tutor/a necesita alcanzar un amplio conocimiento del alumno: cualidades, limitaciones, defectos, ambiente familiar, amigos y circunstancias de interés. Obtendrá esta información a partir del trato confiado con el alumno, de las reuniones con las familias, de otros profesores, del Equipo Directivo y del servicio psicopedagógico del colegio. La actitud del tutor o tutora, será siempre de escucha.

El tutor/a necesita

  • Un buen diagnóstico curricular a partir de las pruebas de nivel inicial, la información suministrada por otros profesores del alumno, por los padres y por el tutor anterior.
  • Conocer bien la marcha académica del alumno.

  • Saber si aprovecha las clases y acude al colegio con el material necesario, si estudia todos los días, a qué horas, cuánto tiempo dedica, si está algún mayor pendiente, lugar en el que lo hace, etc.

Los padres de alumnos agradecen que se les mantenga informados de todo lo que concierne al día a día en el colegio. No sólo saber de su rendimiento, sino de las amistades de las que se rodea, su comportamiento y tono humano.

Cada tutor del CEIP Padre Coloma, lleva una agenda con todas las anotaciones realizadas sobre cada uno de sus alumnos. En ella, se contemplan aspectos importantes de las conversaciones con los niños así como de los tratados en las reuniones con las familias. Procuran poner pequeñas metas que se repasarán en próximas entrevistas. Cada tutor deberá reflejar por escrito, los aspectos tratados en cada tutoría que deberán firmar las familias una vez finalice la reunión personal.

Los alumnos de estas edades son particularmente receptivos, tanto para la acción educativa de los padres y de los profesores, como para las influencias de la televisión, la publicidad y otros medios de comunicación, muy especialmente las redes sociales. Adoptan como modelos de conducta a las personas que admiran, que ejercen sobre ellos una gran autoridad. Por eso, los tutores/as de los alumnos de 6 a 12 años, muy especialmente, han de cuidar mucho los detalles personales, para poder ayudarles eficazmente.

Temas para hablar

Con alumnos

  • Orden: cumplimento del horario, aseo y porte externo, orden material
  • Tono de sus conversaciones y aspectos de cortesía

  • Generosidad, compañerismo, obediencia

  • Trabajo y estudio (Inculcar afición por la lectura)

  • Empleo del tiempo libre (Buen uso de las nuevas tecnologías en especial las redes sociales

  • Prevenirles de los peligros que conllevan)

  • Relaciones con el otro sexo y prevención de conductas inadecuadas

  • Familia

Con padres

  • Insistirles en que son modelos de sus hijos y que deben cuidar todos los aspectos que les exigen a ellos.

  • Necesidad de demostración del afecto sin dejar de exigirle

  • Premios y castigos (reconocimiento de sus esfuerzos sin caer en caprichos)

  • Exigir tono humano en las conversaciones de sus hijos (hablar bien y con educación: pedir las cosas por favor, dar las gracias, pedir perdón…)

  • Hablarles con un lenguaje claro y correcto, razonando con él

  • Tratar los horarios: hábitos y rutinas (sueño, comida, uso de la TV, Redes sociales)

  • Recordar la importancia del orden: en su cuarto, los juguetes, los libros, etc.

  • Cuidar de sus objetos personales y los de los demás

  • Horario personal de trabajo y de ocio de sus hijos

  • Responsabilizarles en casa con encargos concretos

  • Ayudar a otros hermanos más pequeños: contar cuentos, en sus tareas, etc.